Como con cualquier tarifa, las tarifas indexadas serán rentables para algunos usuarios, pero no para otros, todo depende del perfil de consumo.
En este caso, para que una tarifa indexada sea rentable, tenemos que ser capaces de adaptarnos a los horarios en los que la luz es más barata. Recordemos que en estas tarifas, el precio de la luz varía cada hora como puede consultarse aquí.
Las tarifas indexadas son esencialmente tarifas en las que el precio del kWh que pagamos depende directamente del precio de la luz cada hora.
Dentro de las tarifas indexadas hay diferencias que trataremos de explicar, aunque en realidad todas se parecen mucho. Debemos estar atentos a estas pequeñas diferencias para saber cuál de ellas es la que más nos conviene.
Como cualquier tarifa, el precio se divide en grandes campos, la potencia y la energía. El precio de la potencia la fija la compañía que la comercializa, y el precio de la energía, como hemos comentado, depende del precio de la luz por hora.
La relación entre el precio que pagas por la energía y el precio de la luz está directamente relacionada, pero según quien ofrezca este tipo de tarifa tiene ligeros cambios.
Además del PVPC cada compañía tiene su tarifa indexada, entre ellas hay pocas diferencias salvo los márgenes que añaden al precio de la energía o la potencia.
Es interesante también si tienes placas solares verificar a cuánto se pagan los excedentes.
Antes de decidirte por una de las tarifas indexadas te recomendamos simular tu factura para verificar si en el mercado de tarifas libres existe alguna opción con la que puedas ahorrar.
Simula tu factura de la luzSi estás decidido por una tarifa indexada debes evaluar tu perfil de consumo.
Si tu consumo es muy pequeño, por ejemplo para una segunda residencia, te interesa priorizar las tarifas que tengan la potencia más barata, una de tus opciones puede ser el PVPC, aunque también hay tarifas del mercado libre con la potencia al mínimo.
Si es una vivienda de uso habitual, debes comenzar a pensar en las tarifas que priorizan el precio de la energía. En el mercado de tarifas indexadas hay 2 formas de cobrarte por esta energía.
La primera es añadir un margen sobre el precio de coste de la energía. Este margen suele ser pequeño, pero conviene tenerlo en cuenta.
La segunda es cobrar la energía a precio de coste y añadir una comisión de gestión que suele ser fija.
Si tu consumo es mayor de 200 kWh al mes, es muy probable que te salga mejor la segunda opción.
No podemos decir cuál de las 2 es mejor, hasta 2023 sin duda habríamos dicho PVPC, pero desde 2024 el cálculo del precio de la energía es distinto en ambas.
Desde 2024, la energía no se calcula de igual forma en las tarifas indexadas y en PVPC.
En el PVPC, además del precio de la luz hoy se utiliza el precio de los “futuros” de la energía que actualmente están haciendo que el valor suba.
Esto hace que a día de hoy, a no ser que tu consumo sea mínimo, no es conveniente contratar PVPC.
No es posible prever cuánto valdrá la energía a un mes vista, todo lo que nos podemos anticipar es a consultar el precio de la luz mañana.
Cada día a las 20:30 es posible consultar el precio de la energía del día siguiente y si somos lo suficientemente flexibles para aprovechar las horas en las que la energía es más barata, seguramente sí que nos convenga contratar una tarifa indexada.
Los requisitos son los mismos que para cualquier tarifa del mercado libre, con disponer de un DNI, una dirección o el CUPS será suficiente.